Os aconsejamos que primero dejéis que los peques la escuchen a ver que les sugiere. Luego pueden volver a oírla haciendo algún movimiento que les surja.
Si finalmente acaban imitando a un moscardón, podéis decirle que escuchen todavía mas atentos porque ahora tienen que imitar a los moscardones batiendo las alas mas altas o mas bajitas dependiendo de si los sonidos son mas altos (agudos) o mas bajos (graves)
A ver que sale...
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